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Confianza. Eso que se le da a una persona especial. Ese trozito de tu corazón que dejas en sus manos, y que la persona cuida como si fuera su mayor tesoro, su mayor reliquia. Pero otras personas, no cuidan ese sentimiento que les concedes. Lo malgastan, haciéndote sufrir y sufrir. Como si no les importara lo más mínimo. Gente así hay mucha, la mayoría de las personas. Son tus amigos un año y al año siguiente si te he visto no me acuerdo. Yo odio a la gente así, pero no soy la única. Hay mucha gente como yo, gente que lo supera, pero por desgracia también existen personas que todavía no puede dejar de pensar en ello.  Pero os digo que dejéis de darle importancia, si ya no seguís con esa persona mejor, porque os merecéis algo mejor que el/ella. También conozco el dolor  de encontrarse sola y perdida. Pero algún día, encontrareis el camino para salir de esa perdición y podréis ser felices.

Personas de confianza, merecen la pena conocer. Están contigo en los momentos difíciles como también se ríen contigo de los momentos fáciles. Los recuerdos con esas personas no se borrarán ni con tipex, la felicidad que te provocan, no se evaporará con calor, la sonrisa al verles no se eliminará con lágrimas. Porque esas personas, estarán siempre en tu corazón. Cuidándolo, como si fuera suyo.