Darte cuenta de que tus esperanzas son en vano. Que esa persona no va a cambiar, por más que tu lo intentes. Que con el tiempo ha mostrado como en realidad es. Que aunque te diga que ha cambiado, tu sabes que es mentira. Que a lo mejor no se da cuenta, pero tu no dejas de pensar en ello. Que te tiras noches enteras pensando en que había pasado para que sucediera tal cosa. En que sueñas cada día con que todo vuelva a ser como antes. Pero sabes que nunca sucederá. Que todo es diferente y que cada día lo será más. Que ves como se aleja de ti en una carretera donde no hay cambio de sentido. Sientes como antes estabas en primer puesto, y ahora a saber. Observas como antes te contaba su más preciado secreto y que ahora casi te ignora. Que en vez de ir para bien, va a mal. En estos casos...¿Qué hacer?
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